martes, 5 de mayo de 2015

La distante y la constante

Viene mi amada como una nube errante,
Saliendo de ver a sus padres en su hogar distante,
Que ningún desamorado intente de mi quitarte,
Quiero ofrecer en tu mano mi amor constante.

Voy por el camino de la vida a encontrarte,
Y decirte en cuerpo y alma, cada día amarte,
Con tus defectos y mal humor, nunca cambiarte,
En tus conversaciones o silencios llegar a escucharte.

No soy una galaxia, pero me tienes en la luna,
Te ofrezco felicidad pues no tengo fortuna,
Tu voz de la tarde me arrulla como niño en cuna,
Te veo y no veo a nadie mas, sí a ninguna.

26 Noviembre, 2012.
Livingston Villón.